Estimados compañeros y compañeras:

Adjuntamos el Documento con las APORTACIONES de APPRECE al Anteproyecto de Ley de Educación, enviado a la Secretaría de Estado de Educación, el día 12 de diciembre de 2018. En nuestra reunión del Pleno Nacional de APPRECE, del día 16 de febrero de 2019, en Madrid, seguiremos profundizando en nuestras propuestas para las relaciones con la CEE y con el Gobierno de España y en las Autonomías.

Se trata de propuestas-soluciones constitucionales, porque pensamos que los VALORES que se transmiten y se deben transmitir desde las Enseñanzas de Religión y desde la Educación en Valores Cívicos, Éticos, Educación para la Ciudadanía y Derechos Humanos, tienen que ser los MISMOS, hayan elegido o no los alumnos/as las enseñanzas de Religión CONFESIONAL. El artículo 16 de la Constitución Española de 1978, exige la COOPERACION entre el Gobierno del Estado y la Iglesia Católica (y las otras Confesiones Religiosas) y, con la PARTICIPACION de las Asociaciones de PADRES, deben SECUENCIAR los VALORES que desde la Escuela Pública debemos trasmitir a las nuevas generaciones, desde la Educación Infantil hasta el Bachillerato, y, en el caso de las enseñanzas de Religión, mediante un CURRICULO INTEGRADO, con una parte sobre las enseñanzas religiosas confesionales y, de otra, la Educación en Valores, correspondientes a cada Etapa Educativa.

El pasado jueves 31 de enero de 2019, en el Ministerio, a los que participamos en la reunión, nos preguntaban los responsables del equipo ministerial, si estábamos de acuerdo en que todos los alumnos debían recibir una Educación en Valores;  todos respondimos que, por supuesto, es necesario y conveniente. Con estas propuestas de APPRECE, el alumnado que eligiera Religión, recibiría también la Educación en Valores, la misma que van a recibir los que no elijan Religión, solo que estos solo van a estudiar la Educación en Valores, mientras que los que elijan Religión recibirán, además de la Educación en Valores, el currículo de la Religión Confesional que elijan voluntariamente.

Esta fórmula del CURRICULO INTEGRADO, supone un avance muy importante, a la actual fórmula de la LOMCE, manteniendo la OPCIÓN alternativa de sólo Educación en Valores, con lo que se atiende en los centros educativos, la diversidad del alumnado, no creando problema organizativo alguno y siendo ambas opciones evaluables y calificables y tenidas en cuenta en el expediente académico del alumnado, para hallar la media, para otras exigencias académicas y de ayudas al estudio.

Este CURRICULO INTEGRADO, que impartiríamos en la Escuela Pública, exige a la Administración Educativa HABILITAR en la propia Ley, al  Profesorado de Religión que, dentro del Currículo de Religión, va a impartir la Educación en Valores Cívicos, Éticos y la Educación para la Ciudadanía y Derechos Humanos, resolviendo así el vacío legal actualmente existente, por el que, aunque se le considera al profesorado de Religión EMPLEADO PUBLICO, miembro del Claustro a todos los efectos, sólo puede impartir Religión confesional, cuando con la HABILITACIÓN para impartir también la Educación en Valores, estabilizaría su CONTRATO INDEFINIDO, CON SU JORNADA LABORAL FIJA, compuesta de las HORAS LECTIVAS DE RELIGION y completadas con ACTIVIDADES EDUCATIVAS que pueda cubrir en el Centro Educativo en el que está destinado, en caso necesario, tal y como ocurre en las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla.

Si buscamos CALIDAD EDUCATIVA para las nuevas generaciones,  Gobierno e Iglesia y las otras confesiones religiosas deben llegar cuanto antes a un PREACUERDO para incorporar esta FORMULA ORIGINAL a sus negociaciones, ya que supone un avance cualitativo respecto a la fórmula de la LOMCE y en las relaciones Iglesia-Estado, supone el compromiso de cooperar las instituciones, y, en el caso del alumnado, prestando el mismo servicio a todos, desde el respeto a su libertad religiosa y de conciencia.

El Cardenal Arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, criticaba "los constantes vaivenes legislativos" en materia de educación y defendía el derecho de las familias a elegir el modelo educativo para sus hijos, incluida la enseñanza de la asignatura de religión. "Con buena voluntad, se pueden encontrar muchas FÓRMULAS posibles que garanticen la libertad de las familias para escoger el proyecto pedagógico que prefieran".

Aquí ofrece APPRECE una fórmula que puede facilitar la CONCORDIA y  la FRATERNIDAD,  evitando la radicalización de las posturas sobre las enseñanzas de Religión.

Saludos de, 
José Mª Guardia Sierra Presidente de UNION APPRECE ESPAÑA. SINDICATO APPRECE